Qué hacer en caso de temblor o terremoto

Foto por Erick Torres

Para estar preparados es vital participar en forma activa en los Simulacros

Por Ing. Victoriano Báez Camargo 

¿Sabe usted qué hacer en caso de que se presente un temblor o terremoto? ¿Está usted capacitado para actuar en salvaguardar su integridad física y la de sus seres queridos, de sus colaboradores y personas cercanas en el momento de un sismo? Estas son preguntas que debemos hacernos cuando vivimos en una zona de alta incidencia de temblores y terremotos.

Nuestros sentidos se han acostumbrado a experimentar movimientos telúricos leves, de menos de 3 grados en la escala de Richter, y ya no los registran. Sin embargo, la escala Richter es una medida que asciende en forma exponencial. Esto quiere decir, que cuando el grado 1 asciende a 2 es que se ha intensificado 10 veces, de manera que cuando se registra un sismo superior a grado 5, la intensidad del movimiento es muy perceptible y podría tener consecuencias destructivas. 

El territorio mexicano es altamente telúrico por las condiciones de las capas tectónicas próximas a nuestras costas del Océano Pacífico. El terremoto de 1985, y los subsecuentes, fueron causados por un ajuste de dichas capas. En 2017 la situación fue diferente ya que, al parecer, el epicentro se registró en el estado de Morelos, en su colindancia con el estado de Puebla. 

La sismicidad puede ser oscilatoria y trepidatoria, esto es por ondas horizontales o verticales respectivamente. En ambos casos las consecuencias pueden llegar a ser devastadoras.

Un gran avance es contar con un sistema de Alerta sísmica que nos concede la oportunidad de reaccionar con ventaja y ponernos a salvo, saliendo del inmueble y colocándonos lejos de lugares de alto riesgo o bien resguardándonos en un lugar de Protección estructural. Aún así, lo más importante es que estemos capacitados para reaccionar, evitando el pánico. 

Por ello es de vital importancia que participemos en forma activa y responsable en los Simulacros bajo la instrucción de expertos y encargados de protección civil, o bien que nosotros mismos definamos con nuestra familia o vecinos un plan de acción preventivo en caso de sismo. 

En nuestros hogares, nosotros somos los responsables de determinar la Zona de Seguridad Estructural, la cual se localiza entre dos columnas y una pared que no colinde con otra construcción. Este sitio debe estar despejado y ser conocido por todos los habitantes. Ese es el lugar seguro para el Repliegue. 

Una vez en ese lugar debemos colocarnos muy cerca de la pared, con una rodilla y una mano en el piso para guardar el equilibrio y si se oyen ruidos de ruptura estructural, debemos cubrirnos la cabeza. Si nos recargamos en la pared, podemos experimentar mareo y pérdida de la estabilidad. 

Este es el llamado Triángulo de la vida, ya que, en caso de desplome, se forma un triángulo que nos cubrirá. En el pasado, los muebles eran de madera sólida y meterse bajo una mesa era muy seguro. Además, los techos no eran de concreto sino bóvedas ligeras. Hoy los muebles son de aglomerado, los techos son de concreto y los edificios son de muchos pisos. Por eso el triángulo de vida solo funcionará si nos replegamos en la zona de seguridad estructural.

Es esencial tener siempre a la mano el teléfono celular para notificar por mensaje el estado en que nos encontramos. 

Ahora, la pregunta más importante: ¿Qué debemos hacer si escuchamos la alerta o sentimos el movimiento? Todo depende del lugar donde nos encontremos, veamos algunas posibles opciones:

1. En casa, si estamos en planta baja o en el primer piso y hemos establecido la Ruta de Evacuación más adecuada hasta el Punto de reunión, esto es, el lugar seguro fuera del inmueble tenemos de 30 a 60 segundos para trasladarnos con seguridad. Lo podemos evaluar por medio de un simulacro con cronómetro en mano. Si nos encontramos en el primer piso, debemos tener mayor precaución, para evitar estar en las escaleras cuando se inicie el terremoto, ya que es la zona de mayor vulnerabilidad estructural. 

2. En un piso superior al segundo, lo más adecuado es el Repliegue, luego esperar al menos 3 minutos por una posible réplica intensa, y entonces proceder a evacuar al Punto de reunión, sin prisa extrema.

3. En otros lugares, al llegar siempre debemos localizar los señalamientos de Ruta de evacuación y Salidas de emergencia y trazar un plan de Repliegue y/o Evacuación.

4. En caso de personas con discapacidad o de lenta movilidad, el plan es estar capacitados para hacer bien el Repliegue y quedarse ahí hasta que el terremoto haya terminado.

En resumen, es imperativo capacitarnos en Protección Civil y tener una activa y responsable participación en los simulacros, incluso organizando los propios en nuestras casas, edificios o iglesias. 

En todo caso lo más seguro es el Repliegue a la Zona de Seguridad Estructural y una vez concluido el evento, evacuar hacia el punto de reunión donde determinaremos quienes pudieron haber quedado atrapados y facilitar la localización y el rescate.

Lo más recomendable es recibir capacitación grupal o familiar por personal certificado, cubriendo las materias básicas y la formación de brigadas encargadas de: Primeros auxilios, Evacuación, Búsqueda y rescate, Combate y prevención de incendios y Comunicación. 

Podemos encontrar estos recursos y más en sitios como: ​​https://educacion.proteccioncivil.cdmx.gob.mx


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