Ideas para ser más productivos
Foto por Liz Pagliuco
Ve por partes. Algo muy importante y que a mí me funciona es hacer una cosa a la vez
Por René Molina
Paren este tren, que me quiero bajar
Cada día despertamos en un mundo en el que todo se mueve más y más rápido. Tomamos decisiones constantemente y no siempre tenemos el tiempo suficiente para elegir lo mejor. Por si eso fuera poco, nuestras agendas se saturan hasta el tope y el poco tiempo libre que pudiéramos llegar a tener lo queremos dedicar a dormir o descansar. Esto puede causarnos problemas con nuestras relaciones familiares o de amistad, ya que no nos damos el tiempo de alimentarlas como es debido.
A pesar de este panorama poco alentador, existen maneras de mejorar nuestra rutina y hacerla más llevadera. No se trata solo de sobrevivir, sino de disfrutar nuestro día a día. Existen algunas técnicas con las que, en el mejor de los casos, podremos darles un giro a nuestras actividades y restarles un poco de monotonía.
1. Alimento espiritual
Dedica un tiempo del día a platicar con Dios, es un aspecto fundamental en la vida de cualquier persona. Debe ser una prioridad y llevarse a cabo sistemáticamente. Aplica a tu diario vivir, lo que el Señor te vaya mostrando o enseñando, de forma persistente.
Sin duda, ese acercamiento que tienes con tu Creador es un remanso de sabiduría y fortaleza que marca una gran diferencia en tu día. Te dota de más claridad y paciencia al momento de tomar decisiones serias u organizar pendientes. Puedes hacerlo a cualquier hora, pero no lo olvides.
Puedes elegir un libro de la Biblia, tal vez el que más te guste. Estudia parte por parte, extrayendo las enseñanzas más valiosas, orando y agradeciéndole a Dios por ese alimento espiritual. Él está al pendiente de ti, y su Palabra siempre es precisa y oportuna.
2. Haz listas
Puede parecer muy ñoño y seguramente habrá quien te tilde de exagerado por hacerlo, pero las listas son una herramienta de organización muy efectiva. Si funcionan en el súper, ¿por qué no en la vida? Las puedes hacer tan elaboradas o sencillas como desees. Tiene que ser algo que te funcione.
Es buena idea establecer prioridades y con base en eso ordenar las tareas. Haciendo alusión al punto anterior, tu vida devocional debe estar en la cima de esta lista.
Por ejemplo, puedes escribir tu lista a mano y traerla contigo todo el día, marcando con un lápiz o bolígrafo las cosas que vayas completando.
Si eres más digital, puedes usar las notas de tu teléfono móvil que, en algunos casos, ya tienen una función para marcar cada elemento. También existen aplicaciones, como CARROT To-Do, en la que incluso recibes recompensas por completar tareas, así como un severo regaño si no lo haces. Solo está disponible para dispositivos iOS.
Ve por partes. Algo muy importante y que a mí me funciona es hacer una cosa a la vez. Ya que eso me permite dedicarle toda la atención a la tarea en turno y finalizarla de forma más rápida y eficiente.
Entiendo que actualmente el famoso multitasking está a la orden del día y puede que a ti te resulte bien. En cualquier caso, la sugerencia es que lleves cierto ritmo y no quieras comerte la lista de un solo bocado, porque lo más seguro es que te atragantes. Recuerda lo que dice en Eclesiastés: «Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora» (Eclesiastés 3:1. RV60).
Tus objetivos siempre deben ser razonables y alcanzables de acuerdo con el tipo de trabajo o actividad que realices. Así te ahorrarás decepciones cuando veas que en tu lista dice construir una casa y no lo pudiste hacer. Trata de mantenerte dentro de los límites de tu situación y contexto y exígete, pero no seas tan duro contigo mismo cuando por alguna razón esa lista no pueda tener todas las palomitas.
En la medida en la que tus metas sean realistas y plausibles, tu productividad mejorará y te sentirás más motivado para avanzar a la siguiente e incluso ponerte nuevos retos.
¿Conoces los álbumes de estampas? Más allá del dineral que se puede llegar a gastar para llenarlos, son el ejemplo perfecto de la progresión de una lista de pendientes que debe ser completada. Sin embargo, no se trata de comprar 1000 sobres de un jalón, sino que de acuerdo con las posibilidades, se van adquiriendo los cromos poco a poco. Intercambiando otros tantos y completando la colección.
Puedes llegar a desesperarte, pero tener una referencia tangible de lo que quieres lograr, es decir, tu lista de faltantes, te da una sensación de que hay un lugar al cual llegar, una culminación.
3. Cuida la maquinita que hace el trabajo
Los consejos anteriores pueden ser muy útiles y provocar un cambio real en tu desempeño, pero también es extremadamente importante que cuides tu salud. Es fundamental dormir bien, ya que la privación del sueño disminuye drásticamente tu productividad.
Ya ni siquiera se trata de tiempo, sino de que tu cerebro está tan cansado que, por muchas listas que tengas, será muy complicado completarlas. Ciertamente, el Señor nos da fuerzas, pero recordemos su Palabra: «Vengan a mí, todos los que están fatigados y cargados, y yo los haré descansar» (Mateo 11:28).
Dios no solo quiere que trabajemos en su obra, sino que también cuidemos el cuerpo que nos dio para poder servirle mejor. Este versículo habla de cargas y fatigas desde un punto de vista espiritual, pero se trata también de un recordatorio de que debemos descansar en Él tanto espiritual como físicamente.
La alimentación también es un punto clave. Evita mal pasarte. Trata de respetar tus horarios de comida y ten por lo menos 2 colaciones al día. Si la maquinaria no está bien engrasada, simplemente dejará de funcionar (lo de la grasa es un decir, no lo uses como pretexto para entrarle duro a la garnacha). Procura que tu dieta esté balanceada y no te excedas. Cualquier exceso tiene consecuencias negativas.
Más allá de todo, debes vivir con la certeza de que Dios es quien guía tus pasos y te da fuerzas para levantarte todos los días y llevar a cabo las labores que Él mismo te encomienda. En la medida en la que estés en comunión con Él y llenes tu vida con su Palabra y su amor, los tips que te doy en este artículo serán mucho más fáciles de aplicar.
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